Homilías

CRISTO REY

20 de noviembre 2022

Para terminar el Año Litúrgico, la Iglesia nos invita a abrir nuestros corazones para que verdaderamente sea Jesucristo quien reine en ellos.

CRISTO REY

En nuestro mundo contemporáneo la figura de “rey” no es particularmente atractiva, salvo para aquellos que se dejan atraer por vanidades o andan buscando pequeños o medianos escándalos relacionados con infidelidades matrimoniales u otras cosas parecidas. Será preferible no pormenorizar en este tema.

Jesús le reconoce a Pilato: “Tú lo has dicho. Soy Rey, pero mi Reino no es de este mundo”. En un sentido muy distinto pero verdaderamente aclaratorio, Jesús, desde la Cruz, se dirige al buen ladrón que le había suplicado  ”acuérdate de mí cuando estés en tu Reino”, respondiéndole: “Hoy estarás conmigo en el Paraíso”.

Razonando con las mismas palabras leídas en los evangelios, concluimos que el Reino de Cristo es el Paraíso… y como entendemos que el Paraíso no está en la tierra sino en el Cielo, esto es, la Vida Eterna… entonces concluimos que el Reino de Cristo no está aquí sino allá. (¿¿¿????)

De inmediato viene la pregunta: ¿Por qué Jesucristo nos hace rezar en el Padrenuestro “venga a nosotros tu Reino”?  ¿Está allá o está acá? ¡Sabemos que está allá, pero queremos – y así lo pedimos – que esté acá!

¿Qué es el Cielo? ¿Qué es la Vida Eterna?

El Cielo es Dios, es su Presencia Infinita, es su Amor infinito, es su Armonía Perfecta, es la Acogida Abierta de un Corazón Divino a toda su Creación.

¿A qué viene Jesucristo a la tierra? ¿Por qué Dios se hace Hombre y viene a vivir entre nosotros? ¿Por qué viene a hablarnos en lenguaje humano de las cosas de Dios? Porque quiere mostrarnos e invitarnos la forma y el camino para que las cosas de Dios puedan estar a nuestro alcance.

La vida de Jesús, sus palabras, sus milagros, sus acciones, sus actitudes… en Él se hace presente el Reino de Dios entre nosotros. En la misma medida que nosotros abrimos nuestros corazones a Jesús, Él nos abre el suyo y comparte todo lo suyo con nosotros.

La Iglesia, Esposa amada de Jesús, nuestra Madre y Maestra, ha querido enseñarnos en forma didáctica y compacta, las características del Reino de Cristo aquí en la tierra. En la Liturgia de hoy, en el Prefacio que pronuncia el sacerdote, dice: “reino de verdad y de vida, reino de santidad y de gracia, reino de justicia, de amor y de paz”. Si meditamos estas siete palabras y procuramos darles cabida en nuestras vidas, haremos realidad lo que hemos rezado: “Venga a nosotros tu Reino”.

 


Música

29 DE DICIEMBRE: SAGRADA FAMILIA

MODELO DE LA FAMILIA DE NAZARET

Ofrecemos la homilía que años atrás nos envió nuestro amigo Juan Vicente Catret SJ (QEPD)